Juan Luis Guerra contagió anoche de ritmo y romanticismo a las 12.000 personas que acudieron a disfrutar de su concierto en el anexo al Estadio de Gran Canaria. El dominicano, viejo conocido de las Islas, supo poner a bailar a los congregados con una sabia combinación de temas recientes y otros clásicos. La actuación se encuadra dentro de la gira Todo tiene su hora Tour, que lo lleva por distintos puntos de la geografía española junto a sus incombustibles 4.40.